Superman: Man of Steel (El Hombre de Acero) – Un informe completo, por Matías Lértora

Nuestro Matías Lértora cara a cara con el nuevo Superman, Henry Cavill

Matías Lértora es periodista, productor y crítico de cine (en las radios Rivadavia, Palermo e Identidad, y en la prestigiosa web cinesargentinos.com.ar), además de habitual colaborador de nuestro blog. Pero también y sobre todo es fan y coleccionista de Superman. Hace unas semanas cumplió el sueño de su vida al poder participar, como único enviado argentino, del press junket de El Hombre de Acero en la ciudad de México y entrevistar al actor Henry Cavill, el mismísimo Superman de la nueva película, mano a mano. Pueden leer la crónica de esa experiencia y ver la entrevista subtitulada en el sitio cinesargentinos.com.ar:  

Parte 1 – Parte 2 – Parte 3 

Superman, el Hombre de Acero (por Matías Lértora)

El siguiente análisis no es una crítica de la película, sino un informe completo que abarca una gran cantidad de aspectos de El Hombre de Acero. Si no viste la película, una reseña sin spoilers puede leerse haciendo clic aquí. Lo que viene a continuación es un repaso cargado de spoilers sobre esta nueva producción que escribirá una de las páginas más importantes en la historia del primero de los superhéroes.

El NO regreso

El año 2006 era especial para los fans de Superman. Luego de casi diecinueve años (Superman: The Quest for Peace, 1987) y de muchos intentos fallidos, el máximo héroe de todos los tiempos volvía al cine de la mano de Bryan Singer. Lamentablemente Superman Returns no cumplió con las expectativas ni de los fans ni de la Warner. A pesar de haber recaudado casi 400 millones de dólares se la consideró como un fracaso comercial y sólo fue disfrutada por un puñado de personas que seguramente con el tiempo la convertirán en una película de culto. Pese a ese fracaso, Warner quería establecer nuevamente al personaje y Singer firmó contrato para una secuela en septiembre de ese año bajo la condición de incluir más acción. “Voy a hacer como en La ira de Khan”, decía en entrevistas refiriéndose a la famosa segunda parte de las películas de Star Trek, en la que luego de un comienzo tranquilo metieron toda la acción. Pero sus compromisos con su siguiente película (Operación Valquiria, 2008) y la famosa huelga de guionistas de 2007/2008 hizo que las cosas se retrasaran mucho.

A todo esto, Warner estuvo a un pelo de lanzar una película de la Liga de la Justicia (con fecha de estreno para junio de 2009), pero debido a los altos costos que se le fueron de las manos al director George Miller y al no poder hacer reescrituras en el guión, el proyecto se cayó unas semanas antes de comenzar el rodaje, aun teniendo sets construidos y todo el reparto en locación ensayando. El ignoto D.J. Cortona (G.I. Joe. Retaliation, 2013) iba a interpretar a Superman. La Warner comenzó a escuchar nuevas opciones… 

Nolan Rises

No es secreto que el realizador Christopher Nolan se convirtió en un especie de dios dentro de Warner, no solo por haberlos hecho ganar miles de millones de dólares, sino también por darle al estudio prestigio y poder. Por lo tanto, su voluntad se vuelve realidad y afortunadamente Superman se cruzó en su camino.

Cuando Nolan y el guionista David Goyer se encontraban trabados en la escritura del tercer acto de The Dark Kinght Rises (2012) decidieron tomarse un tiempo y reunirse nuevamente. Diez días más tarde, cuando se juntaron, el director preguntó: “¿Y? ¿Qué se te ocurrió?”, a lo que el escritor contestó: “La verdad que nada, pero sé cómo tenés que hacer vos para traer a Superman”. Y allí le comentó la idea que hoy es película y a Nolan le fascinó tanto que llamó inmediatamente a Jeff Rovinov (presidente de Warner) para comentarle la idea. Al día siguiente se reunieron los tres en la oficina y un par de horas más tarde el trabajo era suyo. Mientras Goyer escribía el guión, Nolan se encargó de dar el puntapié inicial a la producción hasta que contrató a Zack Snyder para que se hiciera cargo de la dirección. Lo irónico es que el director de Watchmen (2009) había dicho en el pasado que él nunca podría dirigir una película de Superman porque no veía cómo era posible llegar con el personaje a la audiencia actual. “No fue hasta que Chris y David me contaron su idea que me atraparon, tenía que hacer esto”, declaró recientemente en varias entrevistas.

Habemus Superman

Con los escenarios construyéndose, las locaciones asignadas y el departamento de arte trabajando a full, comenzó lo más difícil: encontrar a Superman. Las vueltas de la vida llevaron a quien fue bautizado por una revista como “el hombre con menos suerte en Hollywood” (estuvo a punto de ser James Bond, Edward Cullen e incluso Superman en la versión que iba a dirigir Mc G previa a Superman Returns) a ser el elegido por Snyder. Y qué buena elección. Las botas dejadas por Christopher Reeve son imposibles de llenar, pero el actor inglés Henry Cavill no solo lo hizo con maestría, sino que representa al Superman de la nueva generación. No solo su físico es el perfecto (o el hombre perfecto para el público femenino), sino que su presencia, carisma y capacidad de transmitir emociones superaron todas las expectativas.

Su rol no es fácil en El Hombre de Acero y logra trasmitir todas las emociones. Su Clark es muy cercano, el más emparejable con el público hasta la fecha, y los otros dos actores que lo interpretan en sus versiones juveniles (Cooper Timberlane y Dylan Sprayberry) terminan por componer un perfecto desarrollo del personaje, con sus aciertos, sus grietas, su heroísmo y un balanceo entre lo alien y lo humano. Y hablando de alien, ese es uno de los grandes giros en la historia que propone Goyer desde el guión: el focalizarse en lo extraterrestre del personaje. Si bien Clark Kent tratando de encajar entre los humanos es, y ha sido siempre, una constante en muchas historias de Superman, aquí está abordada de una manera diferente, dando vuelta el esquema en donde la construcción de Clark Kent humano es intentada pero no lograda y el “disfraz” llega a ser otro.

El traje que usa como héroe es su ropa kryptoniana, sus otras vestimentas fueron las de diferentes tipos (uno llamado “Joe”), pero que nunca fueron Clark. Solo vemos a Clark en su niñez y adolescencia y esas escenas van desde la tristeza hasta la desolación. Por ello, la construcción del personaje en todas sus facetas es perfecta, más aún si se tiene en cuenta que es una película que cuenta los orígenes.

Cuento de dos padres

Un gran aspecto de El Hombre de Acero es el punto de vista y las historias de los dos padres. Desde un Russell Crowe que se come la película hasta un épico Kevin Costner que protagoniza una de las escenas más dramáticas en toda la historia de los films de superhéroes. Cuando Pa Kent muere te pega duro en el corazón, no hay vuelta atrás. Esa escena, con el intercambio de miradas entre Cavill y Costner, logra que todas las películas del universo Marvel parezcan comedias. Y siguiendo con Jonathan Kent, su realismo y temerosidad por proteger a su hijo hacen que sea la mejor construcción (y caracterización) de ese personaje hasta la fecha. Encima está tan bien articulado a nivel guión vía los flashbacks que en un momento te quedás con ganas de más y uno se encuentra a punto de criticar esa ausencia hasta que de repente se nos regala otra fantástica escena.

Jor-El, en esta ocasión, no se limita a la solemnidad de decir monólogos genialmente escritos como la había hecho Marlon Brando en la película de 1978. Aquí su personaje no solo es más activo y físico, sino que también es una parte integral de la historia como un todo. Todas sus escenas son absolutamente geniales, tanto las de Krypton como las de su “fantasma”. Sus intercambios con el Zod de Michael Shannon son brillantes.

Y si hablamos de este último, afortunadamente no pertenece al grupo de “malos porque sí”. Su accionar está más que justificado y sin embargo su hijaputez es genial. Dejaremos su final polémico para lo último, pero ahora resaltaremos a su mano derecha, Faora-Ul  (interpretada por la tenaz Antje Traue), cuyas escenas son geniales.

¿Dónde estás, amor de mi vida, que no te puedo encontrar?

Otro “game changer” del tridente ofensivo Nolan/Snyder/Goyer fue el cambio de paradigma en el triángulo Superman/Lois/Clark. Es muy piola (y muy Siglo XXI) que la periodista ayude al héroe a convertirse en quien termina siendo. Amy Adams brinda una Lois un tanto diferente, sin la chispa característica del personaje, pero parece que es algo que no le exigieron. Sin embargo, es más periodista que nunca y su química con Cavill es innegable, a tal punto que se puede ir observando escena a escena cómo nace la atracción entre los dos. Y si hablamos del las mujeres de El Hombre de Acero no podemos dejar de mencionar a Diane Lane. Su Ma Kent (versión joven y más adulta) es tan tierna como tridimensional.

El comic

Los fans lectores de comics tienen más motivos para alegrarse porque este estreno está plagado de referencias comiqueras. Puntualmente y sin mucho esfuerzo hay tres principales para destacar: The Man of Steel (John Byrne, 1986), de donde se sacó mucho de lo que se puede observar en la película sobre Krypton, así como también la célebre novela gráfica Superman: Birthright (Mark Waid, 2003), de donde se tomaron varios elementos de cómo repercute en la sociedad la aparición de un ser con sus características. Y por último Superman: Earth One (2010, Michael Straczynski), en la que la psicología de Clark está más analizada. No obstante, hay más para destacar, como los guiños a la espectacular Superman: Secret Identity (2004, Kurt Busiek), clara influencia de la escena del interrogatorio. O All Star Superman (2005-2008, Grant Morrison), de donde se extrajo la ya inmortal línea de Jor-El: “They will join you in the sun” (Se unirán contigo en el sol).

Otros detalles son las apariciones de personajes tales como Steve Lombard, Ken Braverman,  Jax-Ur, Kelex, Nam-Ek, Dev-Em, entre otros. Solo un lector de comics de Superman puede identificar esos nombres. También se destacan las tres veces en las que se ve el logo de LexCorp o la escena en la que Superman y Zod atraviesan un satélite con el logo de Waynetech. También aparecen los logos de GBS (el canal de noticias de Metropolis) y “Blaze comics” (la editorial ficticia que publica los comics de Booster Gold). El bar Ace O’ Clubs también hace su aparición, y en Smallville se pueden ver y escuchar unas cuantas referencias a la serie de televisión homónima.

El mesías

Algo que queda claro desde el principio es que se quiso hacer lo contrario a Superman Returns en muchos aspectos, pero sobre todo en el estilo narrativo, la acción y la mirada sobre el personaje. Por eso llama mucho la atención que no solo conservaran algo que el film de 2006 exploró mucho, sino que aquí redoblan la apuesta. Estamos hablando de la alegoría mesiánica sobre Superman, aquella que se desprende de que un padre todopoderoso (Jor-El/Dios), envía a su único hijo (Superman/Jesús) a la Tierra para la salvación de los humanos. En El Hombre de Acero no solo se vuelve a emular una crucifixión, sino que se va más allá con el rol de Superman entre los hombres y con sus decisiones. La escena clave es la que ocurre en la iglesia donde Clark va en búsqueda de consejos y el sacerdote con el que habla, llamado Padre Leone al igual que en la saga «For Tomorrow» (2004/2005, Brian Azzarello), le dice que haga “un salto de fe”. Durante esa charla aparecen dos imágenes de Cristo detrás de cada uno de los personajes, “el sermón de la montaña” que vendría a ser el Jesús seguro de su prédica (que es la imagen que aparece detrás del cura), y “el monte de los olivos”, que vendría a ser cuando Jesús busca consejos (que es la imagen que aparece detrás de Clark). Y como si esto fuese poco, en la escena previa a la «símil cruz», Jor-El le dice a Clark: “Puedes salvarlos a todos”.

La acción y lo técnico

Las peleas, la destrucción de edificios, los poderes, los vuelos y demás efectos visuales son los que los fans siempre soñaron ver en una película de Superman. Snyder lleva todo al máximo y para sorpresa de muchos no utiliza cámara lenta, una de sus técnicas más distintivas. Al suceder todo tan rápido, muchas cosas no son captadas con el ojo en un primer visionado y ese es  tal vez es el único error de la película, las posibles confusiones.

Polémica (superSPOILER)

Si bien la película está teniendo éxito en todo el mundo y le gusta tanto al espectador ocasional como a los fans, hay algo que divide las aguas entre este último grupo: la escena donde Superman mata al General Zod quebrándole el cuello. Superman no mata: ese es su mayor lema y es la primera vez que lo hace en la pantalla (teniendo en cuenta todas las adaptaciones tanto de live action como de animación). Sin embargo, sí lo ha hecho en los comics más de una vez, pero siempre en situaciones límites, siendo la más recordada cuando mata a Zod y otros kryptonianos con kryptonita en un comic de la serie regular publicado en 1988 y escrito por John Byrne, quien luego de esto se vio obligado a renunciar.

Da para un largo debate pero quien escribe piensa que al héroe (en pleno aprendizaje y sin ser ningún experto en combate) no le quedaba otra. Esa familia iba a ser aniquilada y además Superman sabía que no había nada que pudiese contener a Zod, alguien que acababa de perderlo todo y que no tenía otra motivación más que la de aniquilar. De todos modos, inmediatamente el grito resonante de Cavill y su cara de desolación hacen entender que tocó fondo. Y seguramente habrá consecuencias por esto que ojalá sean exploradas en las secuelas.

Por todos estos elementos y porque sentarse en una sala de cine al ver este film no es mirar una película, sino vivir una experiencia, podemos concluir que El Hombre de Acero es la mejor película de Superman de la historia, porque si bien  la película dirigida por Richard Donner y protagonizada por el eterno Reeve es casi perfecta, hoy en día es algo naif y se encuentra un poco post datada. Aquí tenemos un Superman en un mundo real y con reacciones lógicas y coherentes dentro de los parámetros establecidos (nada de hacer girar el mundo hacia atrás para volver en el tiempo ni superbesos amnésicos).

El Hombre de Acero se encargará de devolverle al más grande de los héroes su podio triunfal. ¡Ahora sí Superman regresó!

Matías Lértora

Aquí, el trailer de El Hombre de Acero con subtítulos en español.